Academia de Pediatría recomienda el uso de mascarillas en las escuelas tras preocupación por el aumento de casos de la variante delta

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New York.-Todas las personas mayores de 2 años deberían usar mascarillas, independientemente de su estado de vacunación, cuando las escuelas vuelvan a abrir en el otoño, según una guía actualizada publicada el lunes por la Academia Estadounidense de Pediatría, (AAP, por sus siglas en inglés).

El principal grupo nacional de pediatras dijo que recomienda el uso de mascarillas universal porque gran parte de la población estudiantil aún no cumple los criterios para la vacunación. No está claro qué tan rápido cambiará eso, o qué probabilidades hay de que los padres administren la dosis a sus hijos más pequeños cuando el Gobierno federal apruebe las vacunas para niños menores de 12 años.

La investigación muestra consistentemente que abrir escuelas en persona generalmente no aumenta la transmisión del COVID en la comunidad cuando se emplean el uso de las mascarillas y otros protocolos, dice la AAP, y la aparición de variantes más contagiosas, algunas de las cuales están vinculadas a resultados más severos, representa una amenaza particular para las personas que no están vacunados.

“Hay muchos niños y otros que no pueden ser vacunados”, dijo Sara Bode, MD, FAAP, presidenta electa del Comité Ejecutivo del Concejo de Salud Escolar de la AAP. “Por eso es importante utilizar todas las herramientas de nuestro kit de herramientas para proteger a los niños del COVID-19. Eluso de mascarillas es una de esas herramientas y también se ha demostrado que es eficaz para proteger a las personas contra otras enfermedades respiratorias».

«También es la estrategia más eficaz para crear mensajes y expectativas coherentes entre los estudiantes sin la carga adicional de tener que controlar el estado de vacunación de todos», agregó Bode.

La guía actualizada del grupo de profesionales pediátricos se produce cuando se registra una rápida propagación de la variante delta del COVID-19 en vecindarios con bajos índices de vacunación que amenaza con causar un retroceso en el progreso de la pandemia en la Ciudad de Nueva York (y la nación).

En las últimas semanas han aumentado los llamados de funcionarios electos para que se restablezcan los mandatos del uso de mascarillas en el interior para proteger a los millones de estadounidenses que aún no han sido inmunizados.

Por más de un mes, Nueva York ha informado disminuciones sostenidas en las nuevas infecciones por COVID, así como menos hospitalizaciones y muertes, pero últimamente, los nuevos recuentos diarios de casos han aumentado por encima de los 1,000, un aumento significativo de los aproximadamente 300 a 400 nuevos casos al día que el gobernador Andrew Cuomo estaba informando hace apenas un mes.

En la Ciudad de Nueva York, el promedio de casos nuevos ha aumentado más del 64% con respecto al promedio semanal de las cuatro semanas anteriores hasta el lunes, un aumento discordante impulsado por la variante delta, que ahora es la cepa dominante en los cinco condados y en todo el país.

Cuando se le preguntó el viernes al alcalde de la Ciudad de Nueva York Bill de Blasio sobre el uso de las mascarillas en las escuelas, el alcalde dijo que la expectativa en este momento era que el mandato permaneciera en las escuelas públicas de toda la ciudad. Los CDC todavía recomiendan lo mismo, aunque De Blasio dice que es muy posible que cambie para septiembre. Si lo hace, lo reevaluará.

Más allá del aula, De Blasio se ha mantenido al margen cuando se le preguntó si las reglas de las mascarillas deberían restablecerse más, incluso para los adultos vacunados. El domingo, señaló que no hay ningún plan para hacerlo «en este momento», pero enfatiza que los funcionarios de la ciudad están monitoreando de cerca la situación y están preparados para cambiar la estrategia viral según sea necesario.

De Blasio, como otros, dice que los últimos aumentos de casos se dan en general entre personas no inmunizadas. También señala la disminución sostenida en las nuevas tasas de hospitalización y muerte como testimonio del poder de la vacunación para reducir los peores resultados asociados con la enfermedad respiratoria que surgió por primera vez en Wuhan en 2019.

Hasta la fecha, casi el 65% de los adultos de la Ciudad de Nueva York están completamente vacunados, mientras que más del 70% ha recibido al menos una dosis. En todo el estado, esos números son 67.3% y 74.%, respectivamente, aunque las tasas de inmunización disminuyen considerablemente por edad.

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