Beth Neale y Miles Cloutier, una pareja de enamorados cineastas submarinos, están celebrando el Día de San Valentín con el récord Guinness del beso bajo el agua más largo del mundo, un desafío que, contaron, no fue para nada fácil.
Beth (Sudáfrica) y Miles (Canadá) se besaron durante 4 minutos y 6 segundos bajo el agua en una piscina infinita, superando el récord anterior de 3 minutos y 24 segundos, que se estableció hace 13 años en el programa de televisión italiano “Lo Show dei Record”, de Guinness World Records.
La pareja comprometida, que son ambos buceadores y viven en Sudáfrica con su hija Neve, de un año y medio, viajó a las Maldivas para intentar batir el récord en el complejo LUX South Ari Atoll.
El proceso
De acuerdo a lo que reseña Guinness World Records, la travesía inició a las 7:30 de la mañana, con algunos calentamientos de contención de la respiración y dos besos bajo el agua de prueba de dos y tres minutos, antes de ir por el oro.
Miles, de 33 años, dijo a Guinness World Records que “ni siquiera alcanzábamos el récord existente, ni siquiera estábamos cerca”, pero empezaron a entrenarse unas semanas antes de dirigirse a las Maldivas.
“Fue muy interesante para mí porque soy instructora de apnea (buceo a pulmón)”, expresó Beth a Guinness World Records, quien ha sido cuatro veces campeona sudafricana de buceo libre y ha establecido varios récords nacionales de apnea sudafricanos y récords continentales africanos.
Beth puede contener la respiración durante unos seis minutos y aunque batir récords no era nuevo para ella, el beso más largo bajo el agua lo fue, debido esta fue la única vez que tuvo que quedarse quieta y ser consciente de cuánto tiempo había pasado.
Solicitaron la ayuda del videógrafo submarino de Maldivas, Sidey the Shark, para capturar el momento.
Mientras que Miles disfruta vigilando el tiempo para controlar cuánto tiempo ha contenido la respiración, Beth, de 40 años, preferiría no saber cuánto tiempo estuvo sumergida, según Guinness World Records.
Mucho apoyo
Una multitud también se reunió para ver su intento de récord, y la pareja explicó que habían pedido silencio hasta que superaron la marca de cuatro minutos.
Sin embargo, bajo el agua, no podían escuchar los gritos y vítores de las personas que los miraban.
Miles dijo a Guinness World Records: “Estaba esperando los aplausos porque esperábamos eso y nunca llegó, así que esperábamos y esperábamos».
Un premio significativo
Miles describió su hazaña récord como “el viaje del héroe de contener la respiración”, y admitió que lo encontró difícil desde el principio.
Con sus frecuencias cardíacas altas y la necesidad de respirar cada vez más fuerte, empujaron a través de las barreras para continuar con su beso, y al final todo valió la pena.
