Los funcionarios de salud de Nueva York señalaron ayer sábado que pronto emitirán una guía estatal sobre la administración de una tercera dosis de la vacuna contra el COVID-19 para las personas con sistemas inmunológicos débiles luego de que el Gobierno federal aprobara la dosis adicional.
El comisionado de Salud del estado, Dr. Howard Zucker, confirmó el sábado que el grupo de trabajo de vacunas de Nueva York se reunió el viernes para discutir el asunto y completaría su revisión rápidamente.
Mientras tanto, animó a los médicos a ponerse en contacto con pacientes que podrían cumplir los requisitos para una tercera dosis y «discutir con ellos los beneficios de recibir una dosis adicional».
La Administración de Drogas y Alimentos de EE. UU. dijo el viernes que los receptores de trasplantes y otros pacientes con inmunodeficiencia similar, pero no el público en general, pueden recibir una tercera dosis de las vacunas Pfizer o Moderna, que suelen ser de dos dosis. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades federales respaldaron la decisión.
Nueva York, como algunos otros estados, tiene su propio grupo de trabajo de científicos y expertos en salud que revisan las vacunas contra el COVID-19, un proceso que, según el Estado, tiene como objetivo garantizar la confianza de los neoyorquinos en las vacunas.
La decisión de la FDA se aplica a aproximadamente el 3% o menos de los adultos estadounidenses, incluidos los receptores de trasplantes de órganos. Los CDC afirmaron que otros que podrían calificar para recibir la tercera dosis serían las personas con infecciones por VIH avanzadas o no tratadas y pacientes con cáncer que están recibiendo ciertas quimioterapias.
Los funcionarios de salud de EE. UU. continúan evaluando si se requieren refuerzos para todos y cuándo, pero dicen que aún no es necesario.
