Nueva York no hará cumplir su mandato de exigir que los trabajadores de la salud reciban refuerzos de la vacuna contra el COVID-19 debido a las preocupaciones sobre la escasez de personal, dijeron este viernes funcionarios estatales de salud.
La gobernadora Kathy Hochul señaló un aumento preocupante en las infecciones avanzadas cuando anunció el mandato en enero. Su administración fijó como fecha límite el 21 de febrero.
Pero la comisionada de salud del estado, Mary Bassett, dijo el viernes que la decisión de suspender la aplicación del mandato refleja la realidad de que las tasas de refuerzo siguen siendo bajas, particularmente en los hogares de ancianos.
“Si bien estamos progresando con el 75% del personal que recibió o está dispuesto a recibir su refuerzo, la realidad es que el requisito de la próxima semana no impulsará a suficientes trabajadores de la salud para evitar problemas sustanciales de personal en nuestro ya sobrecargado sistema de atención médica”, dijo Bassett en un comunicado.
El CEO de LeadingAge New York, Jim Clyne, elogió la decisión de Nueva York de detener la aplicación del mandato como «inteligente».
“Tres días no iban a ser tiempo suficiente para obtener suficientes miembros del personal para atender a los residentes y pacientes que tenemos que atender”, dijo.
