El presidente Joe Biden y su homólogo chino Xi Jinping se reunirán en California este miércoles en el marco de la cumbre de Cooperación Económica Asia-Pacífico que tendrá lugar entre el 15 y el 17 de noviembre en la ciudad de San Francisco, lo que constituirá la segunda cumbre entre los dos mandatarios.
Según la Casa Blanca, la reunión entre los dos mandatarios tiene como propósito adelantar discusiones a fin de estabilizar las relaciones entre Estados Unidos y China, e incluirá una serie de puntos álgidos en los que las dos superpotencias difieren radicalmente.
Los mandatarios buscarán normalizar las relaciones bilaterales entre las dos superpotencias
El gobierno de Biden anunció formalmente que la reunión el viernes en la mañana, pero asesores del presidente dijeron el jueves bajo condición de anonimato, que los dos mandatarios sostendrían una discusión amplia, en la que Biden abordará temas controversiales en las relaciones bilaterales como Taiwán y la guerra en Ucrania.
También se espera que Biden advierta a Xi que China no interfiera en las próximas elecciones estadounidenses y que inste al presidente chino a mantener una posición más constructiva en el conflicto en Gaza, dados los cercanos vínculos de China con Irán, nación que apoya a Hamas y otros grupos militantes en la zona.
La reunión ocurrirá un año después de que los mandatarios se reunieron durante la cumbre del Grupo de los 20 en Bali, Indonesia. Después de ese encuentro los dos países parecían estar cerca de regularizar sus relaciones, hasta que la crisis causada por el sobrevuelo de un presunto globo espía chino meses después profundizó el enfriamiento.
Estados Unidos y China también han tenido fuertes roces recientemente por asuntos relacionados con actividades de espionaje de China y las restricciones estadounidenses a las exportaciones de tecnología a China.
Las tensiones persisten y se abordarán, dicen los asesores de Biden, pero este año, funcionarios chinos y estadounidenses también han enfatizado la importancia de fortalecer los vínculos entre las dos economías más grandes del mundo.
China está abierta a los negocios estadounidenses
En el transcurso del último años Biden ya ha enviado a varios altos funcionarios de su gobierno a China, señalando su intención de buscar cooperación y entendimiento entre las dos naciones.
El secretario de Estado Antony J. Blinken, la secretaria del Tesoro Janet L. Yellen y la secretaria de Comercio Gina Raimondo, han visitado China para dejar claro que aún cuando Estados Unidos va a proteger su seguridad nacional, también quiere mantener vínculos económicos con esa nación.
China, por su parte, quiere garantías de que Estados Unidos “no busca cambiar el sistema de gobierno chino, no busca una nueva Guerra Fría, no apoya la Independencia de Taiwán y no tiene intención desvincularse de China”, según dijo el embajador de China en Estados Unidos, Xie Feng, el jueves en un foro en Hong Kong sobre las relaciones entre los dos países.
“Las relaciones todavía enfrentan graves desafíos y todavía queda un largo camino por recorrer para estabilizar y mejorar las relaciones”, agregó Xie.
Xi dedicará gran parte de su visita en reuniones con líderes de industria estadounidense incluyendo una cena de $2,000 por entrada, como parte de una reunión denominada “C.E.O. Summit”, a fin de dejar claro que China está abierta a sus negocios.
