La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, descartó este lunes cualquier posibilidad de devolver la Estatua de la Libertad a Francia, luego de que el eurodiputado Raphaël Glucksmann sugiriera que Estados Unidos ya no representa los valores que inspiraron el regalo en 1884. Leavitt no solo rechazó la propuesta con un tajante «por supuesto que no», sino que además recordó a los franceses que, de no ser por EE.UU., hoy estarían hablando alemán.
El comentario surge en respuesta a la crítica de Glucksmann sobre la situación actual del país norteamericano. Sin embargo, la Casa Blanca dejó claro que la estatua, diseñada por el escultor francés Auguste Bartholdi, seguirá en Nueva York, sin planes de «reembolso» 140 años después de su entrega.
Resumen realizado con la información de EFE-WASHINGTON.