Más de 900 personas han muerto en Israel y la Franja de Gaza desde que comenzó el ataque múltiple y sorpresa del grupo islamista Hamás, considerado una organización terrorista por la Unión Europea, Alemania, Estados Unidos y algunos países árabes.
En Israel, más de 500 personas han perdido la vida, según fuentes oficiales, y 2.048 han resultado heridos, 350 en estado grave. En Gaza, donde Israel ha lanzado decenas de rondas de ataques aéreos contra la infraestructura militar de Hamás, los muertos suman 313, incluyendo 20 niños, y más de 2.000 heridos.
El ejército anunció este domingo que evacuará en las próximas 24 horas a todos los israelíes que viven alrededor de la Franja de Gaza, tras desplegar a decenas de miles de soldados para combatir a los milicianos palestinos infiltrados.
«Nuestra misión en estas 24 horas es evacuar a todos los residentes que viven alrededor de Gaza», dijo a la prensa el portavoz militar Daniel Hagari. Los combates continúan para «rescatar a los rehenes» que los islamistas capturaron en territorio israelí y «mataremos a cada terrorista en Israel», agregó.
Papa Francisco pide que «cesen los ataques» en Israel
«Sigo con aprehensión y dolor lo que está ocurriendo en Israel», declaró el sumo pontífice tras la oración del Ángelus desde la plaza de San Pedro, en Vaticano. «Traslado mi cercanía a las familias de las víctimas».
«Que cesen los ataques y las armas, les pido por favor», dijo ante los fieles congregados. «El terrorismo y la guerra no llevan a ninguna solución, sólo a la muerte y el sufrimiento de muchos inocentes», aseguró.
Familiares de personas desaparecidas acuden a la policía para ayudar en la identificación
Docenas de familiares de personas que desaparecieron en el ataque contra Israel llevado a cabo el sábado desde Gaza por el grupo islamista palestino Hamás, y que se teme que estén muertas o secuestradas, están acudiendo este domingo a un centro para personas desaparecidas operado por las fuerzas de seguridad israelíes cerca del aeropuerto de Ben Gurión, en las proximidades de Tel Aviv, informan medios israelíes.
Los familiares aportan artículos como cepillos de dientes y otras pertenencias personales de sus seres queridos desaparecidos para ayudar a proporcionar muestras de ADN que podrían ayudar a identificarlos. La policía israelí ha pedido a las familias que se pongan en contacto con el centro con fotografías y muestras de ADN de personas desaparecidas.
