El legendario vibrafonista y pionero del jazz-funk, Roy Ayers, falleció a los 84 años en Nueva York tras una larga enfermedad, según informó su familia a través de Facebook. Con una carrera que abarcó más de seis décadas, Ayers dejó un legado musical inigualable, fusionando géneros como el jazz, el soul y el R&B. Su tema más icónico, Everybody Loves the Sunshine (1976), se convirtió en un himno atemporal, influyendo en generaciones de músicos y siendo ampliamente sampleado en la música contemporánea.

Nacido en Los Ángeles en 1940, Ayers creció en un ambiente musical y comenzó a tocar el vibráfono desde los cinco años. Su carrera despegó en los años 60 con el lanzamiento de su primer álbum, West Coast Vibes (1963), y su colaboración con el flautista Herbie Mann en 1966. En los años 70, fundó la banda Roy Ayers Ubiquity, con la que exploró nuevas sonoridades y consolidó su estilo distintivo en discos como Virgo Vibes (1976) y Ubiquity (1971).
Más allá de su éxito en el jazz-funk, Ayers fue una figura clave en la evolución del acid jazz, influyendo en artistas como Guru y Jamiroquai. Su innovadora combinación de ritmos y armonías sigue resonando en la música actual, dejando un legado que trasciende generaciones. Su familia ha solicitado privacidad en estos momentos y ha anunciado que próximamente se llevará a cabo una celebración en honor a su vida y carrera.